Con motivo de celebrarse el 65º aniversario del 17 de octubre de 1945, el ministro de Trabajo Carlos Tomada compartió el sábado pasado un encuentro en el barrio porteño de La Boca con militantes del Movimiento Peronista Bloguero y de redes sociales y de las agrupaciones Descamisados y ADN Nacional y Popular.
“No podía dejar de acompañarlos, éstas son organizaciones y agrupaciones que hoy nos movilizan a nosotros. Es al revés, hay una fuerza y un proceso en marcha que me parece que vale la pena analizar. Los tiempos que se vienen no van a ser fáciles”, señaló el ministro Tomada ante un centenar de militantes con fuerte incidencia en Capital Federal, y destacó que “hay un doble movimiento: por un lado la derecha utilizando a los medios y por el otro se ha generado una reacción muy grande, muy emocionante, que entusiasma mucho y que nos obliga a movilizarnos: son ustedes. Esta idea que aparece en la militancia, lo veo en todo el país pero lo veo también y muy fuerte en Buenos Aires”
“Hay una efervescencia, la militancia ha vuelto a sentir que hay algo por lo que vale la pena pelear. Ha aparecido muy claramente la reflexión acerca de que vienen por nosotros. No es sólo un problema de partidos políticos sino de dos modelos de país que se van a poner en juego en la elección de 2011: uno basado en la idea del trabajo, la producción, la industrialización y otro que ya hemos conocido en el pasado, el de la especulación financiera, el desmantelamiento de la industria, la generación de desempleo, el aumento de la pobreza… Estamos viviendo una línea de confrontaciones por parte de aquellos que han decidido que nosotros seamos no una alternativa de gobierno sino sus enemigos. Ellos nos han puesto en ese lugar porque necesitan que este modelo no se consolide”, advirtió.
El titular de Trabajo se refirió también a la existencia de dos modelos de país en el escenario internacional: “Uno que plantea una activa política regional a través del UNASUR, que tiene fuerte presencia internacional a partir del G 20, que preside el G 77, conformado por países en vías de desarrollo más China , que es reconocido en el terreno internacional por sus políticas activas de empleo y por cómo enfrentó la crisis internacional junto con Alemania; el otro modelo es que apela a las ‘relaciones carnales’ como única regla, en el que Malvinas dejará de ser una bandera y un objetivo permanente de los argentinos”.
“En los años 70 –continuó Tomada– la Argentina era una de las sociedades más igualitarias de la región y del mundo; por eso no fue casual el golpe de estado del 24 de marzo del 76. Porque la distribución del ingreso y el Estado del bienestar impedían los planes que la derecha y los sectores de la concentración económica tenían para el país. Sin embargo, a partir de la profundización del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, la derecha se dio cuenta de que todo lo que ellos creían que habían liquidado definitivamente está volviendo a construirse sobre el eje de la producción y el trabajo, con un fuerte acento en la industrialización, generando casi 5 millones de puestos de trabajo, creando la asignación universal por hijo, fortaleciendo la presencia de las organizaciones sindicales para generar un equilibrio entere trabajadores y empleadores.”
“Durante muchísimos años los gobiernos se dedicaron a cuidar los derechos de los poderosos”, ya sea “por la vía armada o por la vía democrática”, dijo, y resaltó que hoy la oposición habla de seguridad jurídica “pero no levantaron un dedo por la seguridad jurídica cuando se arrasaban las empresas del estado, se vulneraban los derechos de los trabajadores y se les destruían los ingresos y el futuro a los jubilados”.
En cuanto a la aprobación de la Ley del 82% móvil para los jubilados, sostuvo que fue de “una banalidad y frivolidad total” por parte de la oposición. “A través de toda nuestra gestión hemos demostrado en qué dirección van nuestras políticas jubilatorias y que sabemos cómo se construye un sistema de seguridad social sustentable en el tiempo. un sistema de seguridad social que sea sustentable en el tiempo. Nadie de los que impulsaron esa ley tiene un pasado que le permita acreditar que ellos se iba a preocupar por los jubilados. No lo hicieron nunca. Lo que hay es simplemente es un negocio financiero, y el objetivo de desgastar políticamente al gobierno y que, finalmente, todo vuelva al sistema de capitalización”.
“Es tan banal, tan superficial, tan despiadado desde el punto de vista político lo que han hecho –prosiguió–, que merece realmente un repudio. Por eso a la Presidenta no le tembló el pulso a la hora de firmar el veto. Cuando hay una crisis en el mundo –agregó–siempre lo que se hace es ajustar por el lado de la seguridad social, y este gobierno hizo exactamente lo contrario. Esto que han propuesto es frívolo hasta en la redacción del proyecto de ley, porque ni siquiera explicaba cuáles iban a ser las normas de financiamiento. Por otro lado, quieren recuperar las acciones de las empresas monopólicas que hoy están en manos del Estado, como Techint y Clarín, todas las que tenían las AFJP”.
Tomada subrayó que “la oposición celebra o patrocina medidas cautelares para que Clarín no tenga que vender rápidamente las inversiones que lo convierten en monopolio, pero por otro lado pide que el Estado se desprenda en 30 días de activos que están sosteniendo el sistema de la seguridad social”.
“Esta movilización –insistió–, esta decisión de volver a la militancia, de comprometerse con la política, esa herramienta fenomenal de transformación social, esta reivindicación de la política se da porque es cada vez es más evidente que este no es un gobierno que vino a consolidar a los poderosos, sino que los está enfrentando, y está resistiendo una ofensiva brutal de la derecha, que no quiere permitir que la Argentina se transforme y sea más justa para todos.”
“Está planteada esta idea: ellos se están dando cuanta de que todo lo que hicieron desde el 24 de marzo del 76 en adelante no les alcanzó, porque otra vez el pueblo está de pie, los jóvenes se han acercado a la política y la transformación de la Argentina no se detiene: otra vez el movimiento obrero es capaz de hacer una movilización para festejar su día, otra vez el Estado vuelve a ocupar un rol importante, otra vez la seguridad social está en manos de los trabajadores, y hay varios “otra vez” más”, completó.
“Hoy hay una fuerza muy grande que nos empuja a todos a no aflojar, nos obliga a estar en la calle, a estar acá compartiendo con ustedes y discutiendo con la alegría pero a veces también como fieras, con los dientes apretados. Estoy convencido de que con estas acciones, con este compromiso militante, estamos dando todos juntos un paso más para que la Argentina sea más justa más solidaria, como siempre lo soñamos nosotros, como nuestros jóvenes, que son el presente del futuro. Creo realmente que la Argentina se merece que la ciudad de Buenos Aires se encolumne en este proyecto político nacional y popular”, finalizó.
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