EL HECHO MALDITO

A principios de Julio de este año, escribí un post llamado "Irreversible" en el que intenté definir una serie de temas que los gobiernos peronistas de Néstor Kirchner y de Cristina Fernández dejaron marcados a fuego en la discusión política argentina de aquí hacia adelante. Esto se refería a la fuerte evidencia de que el neoconservadurismo restaurador, liberal y antiobrero que se denomina mediáticamente como "peronismo disidente", propone una suerte de retroceso histórico a formas de relaciones sociales pre-peronistas y un modo de producción basado en el modelo agropexportador instaurado en 1880, aunque en su variante sojera. En este punto, el "kirchnerismo" volvió a imponer conceptos que habían sido relegados al arcón de los recuerdos por el liberalismo impuesto por la dictadura y consolidado en la década infame del menemato. Estos conceptos, enumerados fragmentariamente en el post de marras, constituyen una referencia que ya nadie podrá obviar, salvo que un desmesurado operativo de anestesia social como fueron la "plata dulce" de Martínez de Hoz y el "uno a uno" de Cavallo vuelva a poner a las clases medias argentina en cuatro patas. Por ahora, y pese a que la discusión política se encuentra rebajada a una retahíla de eructos paranoicos diseñados exclusivamente a medida de los canales de noticias de los grupos concentrados, por una oposición que ha quedado prisionera de su propia artificialidad y también por la poca prudencia de algunos miembros poco inteligentes del funcionariado de segundas y terceras líneas del oficialismo; ahora, digo, los argentinos nos hallamos discutiendo temas con los que no podíamos siquiera soñar hace una década atrás. Y eso es un triunfo innegable del peronismo kirchnerista. En un país asolado por la ofensiva mediática más formidable de su historia, que busca imponer manu militari un discurso único orientado a proteger los privilegios de los grupos concentrados y su entramado de negocios, que temas como estos hayan quedado como referencia obligada de plataformas y debates, es un triunfo que quizás será valorado con justicia dentro de un tiempo, cuando exista la libertad de expresión que ahora mismo coartan los monopolios desinformativos. Un triunfo más del "hecho maldito" de la historia nacional: el peronismo. Y no será, justamente, gracias a la patética oposición que le ha tocado padecer a este gobierno.

MP